domingo, 10 de septiembre de 2006

Acertijos y disfraces


Con todas sus imperfecciones (siseo de la cinta, cuerdas que cerdean, coches que pasan), las grabaciones caseras, guitarra y voz a pelo, tienen una calidez que se pierde siempre cuando uno graba por pistas. Esta canción, por ejemplo, cantautoril y cientovolandera, es lo que es en estado puro. Así les encuentre.

He llegado a conocerte
y ahora quisiera contarte
que cerraba bien los ojos
siempre que salía a buscarte.
Con las manos encendidas
me escapaba cada tarde:
callejuelas y avenidas,
acertijos y disfraces.
Te he esperado sin buscarte,
sin saber nada de ti.
No sabría cómo explicarte,
pero hoy sé que estás ahí.
Atravieso solo el parque,
cae la lluvia en la ciudad.
Me confundo entre la gente
como un pasajero más.

Navegar a la deriva,
viajar a ninguna parte,
verte en todas las sonrisas,
aprender a imaginarte.
Temporales que se calman,
ventanitas encendidas
donde se asoman las almas,
apeaderos de la vida.
Florecen tardíos los besos,
vuelvo a sitios que no están,
te he buscado en los reflejos
de las cosas que se van.
Salgo de mis pensamientos,
pongo en hora el corazón,
he llegado sin buscarte
hasta la última estación.

Cosas que no sé contarte,
desengaños y esperanzas,
juegos y casualidades,
sueños y amapolas blancas.
Olvidar los cargamentos,
aprender a hablar de nuevo,
ventilar las ilusiones,
afilar los lapiceros.
Navegar contra corriente,
probar suerte por probar:
cosas que son imposibles,
cosas que pueden pasar.
He llegado a conocerte,
te has cruzado por azar.
Te he mirado hasta perderte
y he empezado a caminar.

(Daniel Martín)





3 comentarios:

Juan Poz dijo...

Ah, caramba, pues me ha gustado, he de reconocer. A medio camino entre Antonio Vega y Luis Eduardo Aute, podría haberla firmado cualquiera de los dos. No escondo que tiene una cierta "blandenguería" de entonación, algo así como un "tempo lastimoso" que la lastra un poco; pero el conjunto es más que aceptable. Supongo que la monotonía melódica está al ssrvicio de la letra, llena de imágenes felices. ¡Cómo me ha hecho viajar al pasado, la coplilla! Aquel Madrid de 1968 en el que formaba parte del trío "Experiencia texto y cuerda" y le dabámos al tostón cosa mala... En fin.

Al59 dijo...

Gracias por la crítica. Tempo lastimoso no es mal título, no sé si para un grupo, un disco o un libro. Iba a decir que Aute no, pero después he recordado Queda la música (lastimera). Podría ser: preguntaré al autor. De ese 68 madrileño podría, si le apetece, contarnos algo (y así compensamos tanto oído sobre el de París).

Anónimo dijo...

Me ha gustado la cancio, te he leido en un comentario de otro blog, y pq me suena a mi oximoro???Un saludo, al lado de blogs asi me siento pequeña, pero bueno yo soy aprendiz...;)