lunes, 5 de junio de 2006

El jardín de los muertos


POEMA DEL CEMENTERIO
[metamorfo]

Fue la mejor noche de mi vida.
Aunque aún no había hallado una mujer,

tenía a mis amigos a mi lado.
Estábamos muy juntos;

brincamos por la tapia,
saltamos al cementerio.

Las sombras antiguas nos rodeaban por todas partes.
El húmedo rocío
resultaba más fresco que la niebla.

Dos hicieron el amor en un lugar antiguo,

uno fue a cazar un conejo a las tinieblas,

una chica se emborrachó y se tiró a los muertos
y yo le di sermones vacíos a mi cabeza.


Cementerio, frío y tranquilo,
odio tener que dejar tu terreno sagrado;

temo la lechosa llegada del día.

(Devocionario pop)



4 comentarios:

Anónimo dijo...

Al, no sabe lo bien que me sientan Doors el día de mi cumpleaños. Gracias. Estuve pegado a 'Waiting for the sun' en vinilo años, hasta un desgraciado traslado de domicilio. Gracias a disfrutar.

Anónimo dijo...

Otra cosa, al hilo de la letra. El cementerio como universo en negativo, el museo de lo que jamás se llegó a cumplir. (No hay nada más emocionante que concebir uno). Lo más magnético de un cementerio urbano es esa sensación casi física de vitalidad que trasmite... el vigor de los cipreses, las orquestas de pájaros... Père-Lachaise. Un saludo.

Al59 dijo...

Los borrachos en el cementerio
juegan al mus

...y soplan las velas (de la Santa Compaña).
Enhorabuena, Sr. Verle. Siempre es un lujo tenerle de visita por estos campos santos.

Al59 dijo...

Si es que para locus amoenus, jardín de la alegría, los Campos de Juncos (o los del Elíseo). Los verdes caminos del Amenti, que decían ciertos egiptómanos. Let's wander slowly through the fields....